Oferta gastronómica, repostería, artesanía…

Asociación de comerciantes minoristas Mercado de Abastos de la Feria

Dirección: Calle Feria 98
Otras indicaciones: Mercado de la Feria
Horario: De 20.00 a 01.00
Precio: Gratuito

EL ACCESO A LAS INTALACIONES DEL MERCADO DE LA FERIA ES GRATUITO Y EL PRECIO SERÁ VARIABLE SEGÚN OFERTA GASTRONÓMICA, REPOSTERÍA, ARTESANÍA…

No encontramos en una zona que existe desde los tiempos romanos, aunque aquí existían cementerios y alguna villa. Con la llegada de los visigodos se erige el primer edificio religioso debajo de donde se encuentra hoy la iglesia De Omnium Sanctorum. De iglesia visigoda, pasó a ser mezquita y con los musulmanes llegó la ocupación urbanistica entrando dentro de la primera muralla de la ciudad.
La ubicación y las dos entradas desde el norte, hizo que la calle
Ancha de la Feria fuera una prolongación hacia el centro de la urbe, convirtiéndolo en eje comercial de los productos agroalimentarios. En 1254 el rey
Fernando III de Castilla, concedió dos ferias a la ciudad (situada en la zona de la antigua
Plaza del Pan) y la que a día de hoy sigue convertida en el Mercadillo del Jueves, que entonces ocupaba toda la calle dando la vuelta a la iglesia (ya cristiana) y ocupando toda la plaza situada a los pies del
Palacio de los Marqueses de la Alagaba (entonces no era tal); a la calle se la llamó de la Feria y a la Plaza del mismo modo. A lo largo del siglo XV aparecen las casas, llamadas, «Principales» de los señores nobles para estar cerca del centro político y económico. El Señor de la Algaba, Marqués desde 1568 con Felipe II, edificó en la Plaza de la Feria su «Casa Principal» donde controlaría una zona de vital importancia comercial de la ciudad. En 1719 cedieron sus caballerizas para el primer mercado de abastos fijo, y comenzaron vendiendo pan. EN 1837 se expropia la Plaza y se agrega un segundo palenque o módulo. Y para la exposición de 1929 se terminaron los dos palenques o módulos restantes, que lindan con la iglesia.
Por aquí han pasado revueltas, huelgas, incendios, guerras.
Pero todo esto no ha minado en absoluto el espíritu comercial de este barrio tan emblemático.
Ven a visitar el mercado de abastos mas antiguo de Sevilla, no te arrepentirás.